Hay dos momentos del día en que resultan más efectivos: Nada más despertar y justo antes de dormir. En esos momentos el consciente está relajado y por lo tanto el decreto se graba en estructuras más profundas de la mente (subconsciente e inconsciente), con lo cual resulta más efectivo, pues ese propósito u objetivo que nos hemos fijado aflorará cuando sea necesario al no tener el “control” de la parte más racional de nuestra mente (consciente), que siempre tenderá a enjuiciarlo.
Evidentemente es una herramienta para ayudar a eliminar hábitos o conductas que no son beneficiosos para la persona, a reforzar la autoestima, a generar asertividad, a eliminar miedos, rechazos, bloqueos o expectativas… en definitiva la idea es enfocar la atención y dirigir nuestra mente hacia un objetivo concreto. Es como si en lugar de encender una bombilla pudiéramos concentrar todos los fotones de luz en un haz coherente convirtiéndolo en un rayo láser que apunte directamente hacia la frase que hemos formulado.
Louis Hay fue pionera en este tipo de técnicas psicológicas que algunos terapeutas utilizan. Desde entonces su práctica se ha extendido y popularizado y se consideran herramientas de crecimiento personal fáciles y asequibles. No obstante, son técnicas de apoyo que no deben reemplazar el asesoramiento profesional si es necesario.
Recuerda que los decretos positivos son una herramienta complementaria y no deben considerarse como una solución única para todos los problemas. Combínalos con otros enfoques positivos y, si es necesario, busca el apoyo de un profesional de la salud mental.
Evidentemente es una herramienta para ayudar a eliminar hábitos o conductas que no son beneficiosos para la persona, a reforzar la autoestima, a generar asertividad, a eliminar miedos, rechazos, bloqueos o expectativas… en definitiva la idea es enfocar la atención y dirigir nuestra mente hacia un objetivo concreto. Es como si en lugar de encender una bombilla pudiéramos concentrar todos los fotones de luz en un haz coherente convirtiéndolo en un rayo láser que apunte directamente hacia la frase que hemos formulado.
Louis Hay fue pionera en este tipo de técnicas psicológicas que algunos terapeutas utilizan. Desde entonces su práctica se ha extendido y popularizado y se consideran herramientas de crecimiento personal fáciles y asequibles. No obstante, son técnicas de apoyo que no deben reemplazar el asesoramiento profesional si es necesario.
Recuerda que los decretos positivos son una herramienta complementaria y no deben considerarse como una solución única para todos los problemas. Combínalos con otros enfoques positivos y, si es necesario, busca el apoyo de un profesional de la salud mental.
Decretos Positivos
Construye afirmaciones positivas, frases encaminadas a reforzar la autoestima, a promover algún cambio en tu conducta. Por ejemplo: “Gestiono mi vida con seguridad y confianza”, "Merezco ser feliz", "Soy capaz de superar cualquier desafío", “La abundancia llega a mi vida”, “Todo está bien”, “Decido comenzar mi día con serenidad y apertura”, “Conecto con la compasión, esto me libera de la carga negativa que generan la ira, el enojo, el rechazo y las expectativas”, “Soy libre para tomar mis propias decisiones”.
Se deben repetir esas frases a diario, en esos dos momentos que hemos apuntado antes y también en cualquier momento en que aparezca el estrés o la ansiedad, o cuando nos encontremos “cayendo” en ese comportamiento que no deseamos.
Antes de formular el decreto es necesario identificar los pensamientos negativos que tenemos y las experiencias no asimiladas, traumas o comportamientos no deseados, en ese primer paso cuestionamos esos pensamientos que tienen efectos negativos en nosotros y los cambiamos por frases más realistas y equilibradas que nos ayuden a recuperar el bienestar emocional, a reducir la angustia o la ansiedad.
Al escribir afirmaciones positivas sobre uno mismo y leerlas en voz alta se refuerza la autoestima, al utilizar un lenguaje positivo y afirmativo tenemos más posibilidades de conseguir logros y responder más adecuadamente a los retos que se nos plantean. Vamos incorporando creencias positivas sobre nosotros mismos que reemplazarán a las creencias limitantes que antes nos atenazaban.
Estas técnicas son de apoyo, en ningún caso sustituyen la ayuda de un profesional de la salud mental. Los terapeutas pueden utilizar técnicas específicas, como la terapia cognitivo-conductual o la terapia de exposición, para abordar traumas y conductas de mayor intensidad.
Recuerda que estos consejos son generales y pueden no ser adecuados para todos. Si estás lidiando con traumas significativos o conductas problemáticas, es crucial buscar el apoyo de un profesional de la salud mental que pueda adaptar las estrategias a tus necesidades específicas.
Se deben repetir esas frases a diario, en esos dos momentos que hemos apuntado antes y también en cualquier momento en que aparezca el estrés o la ansiedad, o cuando nos encontremos “cayendo” en ese comportamiento que no deseamos.
Antes de formular el decreto es necesario identificar los pensamientos negativos que tenemos y las experiencias no asimiladas, traumas o comportamientos no deseados, en ese primer paso cuestionamos esos pensamientos que tienen efectos negativos en nosotros y los cambiamos por frases más realistas y equilibradas que nos ayuden a recuperar el bienestar emocional, a reducir la angustia o la ansiedad.
Al escribir afirmaciones positivas sobre uno mismo y leerlas en voz alta se refuerza la autoestima, al utilizar un lenguaje positivo y afirmativo tenemos más posibilidades de conseguir logros y responder más adecuadamente a los retos que se nos plantean. Vamos incorporando creencias positivas sobre nosotros mismos que reemplazarán a las creencias limitantes que antes nos atenazaban.
Estas técnicas son de apoyo, en ningún caso sustituyen la ayuda de un profesional de la salud mental. Los terapeutas pueden utilizar técnicas específicas, como la terapia cognitivo-conductual o la terapia de exposición, para abordar traumas y conductas de mayor intensidad.
Recuerda que estos consejos son generales y pueden no ser adecuados para todos. Si estás lidiando con traumas significativos o conductas problemáticas, es crucial buscar el apoyo de un profesional de la salud mental que pueda adaptar las estrategias a tus necesidades específicas.
Beneficios de los Decretos Positivos
- Fomentan un Pensamiento Positivo: Los decretos positivos promueven el pensamiento positivo y ayudan a contrarrestar patrones de pensamiento negativo.
- Refuerzan la Autoestima: Al centrarse en aspectos positivos de uno mismo, los decretos positivos pueden fortalecer la autoestima y la autoimagen.
- Redirigen la Atención: Ayudan a redirigir la atención de pensamientos negativos hacia pensamientos constructivos y esperanzadores.
- Generan Actitudes Positivas: Al repetir afirmaciones positivas, se puede cultivar una actitud más positiva hacia la vida y sus desafíos.
Pueden Influenciar el Comportamiento: Algunas investigaciones sugieren que las afirmaciones positivas pueden influir en el comportamiento al afectar la percepción y la autoeficacia.
Cómo Formular Decretos Positivos
- Sé Específico: Formula decretos específicos y concretos. En lugar de decir "Soy feliz", puedes decir "Cada día encuentro razones para sentirme alegre y agradecido".
- Utiliza el Presente: Formula tus decretos en tiempo presente como si ya estuvieran sucediendo. Por ejemplo, "Estoy en el camino hacia la superación personal".
- Sé Positivo y Afirmativo: Utiliza un lenguaje positivo y afirmativo. Evita negaciones. En lugar de decir "No tengo miedo", puedes decir "Soy valiente y enfrento mis miedos".
- Sé Realista: Aunque es positivo, es importante que tus decretos sean realistas y alcanzables. Esto ayuda a que sean más efectivos y creíbles para tu mente.
- Concéntrate en lo Que Quieres: Enfócate en lo que deseas lograr en lugar de lo que estás tratando de evitar. Por ejemplo, en lugar de decir "No quiero estar estresado", puedes decir "Cada día encuentro calma y equilibrio en mi vida".
- Personaliza tus Decretos: Ajusta tus decretos para que se adapten a tus objetivos y circunstancias personales. Cuanto más personalizados y significativos sean, más impacto tendrán.
- Repite Regularmente: La repetición regular es clave. Repite tus decretos diariamente, especialmente en momentos de estrés o duda. Hay estudios que apoyan la repetición ininterrumpida durante 21 días para lograr el cambio que buscamos arraigue y se produzca una transformación en la forma de pensar.
Y por último recuerda: no se trata solo de repetir las afirmaciones o realizar los ejercicios, lo ideal es acompañarlo de una consciencia presente de lo que estás haciendo y lo que deseas cambiar… de esta forma tus esquemas mentales se irán transformando y darán como resultado nuevas actitudes, otra forma de reaccionar, y otra manera de interpretar la realidad que vives.
Te animamos a formular tu decreto positivo, con tus propias palabras, con tu sentimiento y tus deseos de cambio. Escríbelo y léelo cada día comenzando el 1 hasta el 21 de diciembre, preparándote para recibir la energía de renovación del Solsticio de Invierno que este año será en la madrugada del 22 de diciembre.
Te animamos a formular tu decreto positivo, con tus propias palabras, con tu sentimiento y tus deseos de cambio. Escríbelo y léelo cada día comenzando el 1 hasta el 21 de diciembre, preparándote para recibir la energía de renovación del Solsticio de Invierno que este año será en la madrugada del 22 de diciembre.