Cuando te enamoras sientes que puedes volar, deseas estar con la persona objeto de tu amor porque piensas que es ella quien te hace volar. Sin embargo, al cabo del tiempo te das cuenta de que la capacidad de volar está en ti, si no fuera así no podrías volar, nada ni nadie conseguiría que lo hicieras, porque no es algo que venga de afuera sino que se genera en el interior de tu mente profunda y de tu corazón.
Es importante darnos cuenta de que el sentimiento de amor es una fuerza, una energía que tenemos los seres humanos y que es capaz de transformarlo todo, desde el mundo de lo material hasta el mundo sutil de las emociones.
Durante muchos años, nuestra civilización se ha decantado por recorrer el camino de la mente, un camino que genera en las relaciones interpersonales prejuicios, separación, expectativas y, finalmente, sufrimiento al empeñarnos en que las personas y las cosas se ajusten a la idea que nosotros tenemos de ellas. Es el momento de hacer un alto en el camino y observar un pequeño sendero, poco transitado hasta ahora, que está a nuestro alcance: el reencuentro con nuestro corazón. Un recorrido interno en el que es necesario identificar y reconocer los sentimientos para poder expresarlos a los demás. Tenemos poca experiencia en ese terreno, sabemos hablar de nuestros problemas pero no de lo que sentimos y esa es la llave que nos acerca a los demás. Las ideologías, las creencias, las culturas separan a los seres humanos, los sentimientos y las emociones compartidas los acercan.
Es importante darnos cuenta de que el sentimiento de amor es una fuerza, una energía que tenemos los seres humanos y que es capaz de transformarlo todo, desde el mundo de lo material hasta el mundo sutil de las emociones.
Durante muchos años, nuestra civilización se ha decantado por recorrer el camino de la mente, un camino que genera en las relaciones interpersonales prejuicios, separación, expectativas y, finalmente, sufrimiento al empeñarnos en que las personas y las cosas se ajusten a la idea que nosotros tenemos de ellas. Es el momento de hacer un alto en el camino y observar un pequeño sendero, poco transitado hasta ahora, que está a nuestro alcance: el reencuentro con nuestro corazón. Un recorrido interno en el que es necesario identificar y reconocer los sentimientos para poder expresarlos a los demás. Tenemos poca experiencia en ese terreno, sabemos hablar de nuestros problemas pero no de lo que sentimos y esa es la llave que nos acerca a los demás. Las ideologías, las creencias, las culturas separan a los seres humanos, los sentimientos y las emociones compartidas los acercan.
La ciencia del corazón
Nuevas investigaciones confirman que el corazón humano es mucho más que una bomba eficiente que sostiene la vida. Ahora varias disciplinas científicas sugieren que el corazón también es un punto de acceso a una fuente de sabiduría e inteligencia a la que podemos recurrir para vivir nuestras vidas con más equilibrio, mayor creatividad y capacidades intuitivas mejoradas. Todo esto es importante para aumentar la efectividad personal, mejorar la salud y las relaciones interpersonales y lograr una mayor plenitud.
He aquí un pequeño resumen de las investigaciones realizadas sobre la Ciencia del Corazón por el Instituto HeartMath y por prestigiosas universidades tanto de EE.UU. como de Europa. Este resumen explorará aspectos desconocidos de la ciencia del corazón, gran parte de la cual todavía es relativamente poco conocida fuera de los campos de la psicofisiología y la neurocardiología. Destacaremos la investigación que une la ciencia del corazón y el conjunto de habilidades altamente prácticas basadas en la investigación y que se recoge dentro del término genérico Sistema HeartMath.
El corazón ha sido considerado como la fuente de las emociones, el coraje y la sabiduría durante siglos. Durante más de 29 años, el Centro de Investigación del Instituto HeartMath ha explorado los mecanismos fisiológicos por los cuales el corazón y el cerebro se comunican y cómo la actividad del corazón influye en nuestras percepciones, emociones, intuición y salud.
Al principio de su investigación se plantearon por qué las personas experimentan el sentimiento o la sensación de amor y otras emociones regenerativas, así como el dolor en el área física del corazón. A principios de la década de 1990, fueron pioneros en realizar una investigación que no solo analizó cómo las emociones estresantes afectan la actividad en el sistema nervioso autónomo (SNA) y a los sistemas inmunitarios y hormonales, sino también los efectos de las emociones positivas como la apreciación, la compasión y el cuidado.
He aquí un pequeño resumen de las investigaciones realizadas sobre la Ciencia del Corazón por el Instituto HeartMath y por prestigiosas universidades tanto de EE.UU. como de Europa. Este resumen explorará aspectos desconocidos de la ciencia del corazón, gran parte de la cual todavía es relativamente poco conocida fuera de los campos de la psicofisiología y la neurocardiología. Destacaremos la investigación que une la ciencia del corazón y el conjunto de habilidades altamente prácticas basadas en la investigación y que se recoge dentro del término genérico Sistema HeartMath.
El corazón ha sido considerado como la fuente de las emociones, el coraje y la sabiduría durante siglos. Durante más de 29 años, el Centro de Investigación del Instituto HeartMath ha explorado los mecanismos fisiológicos por los cuales el corazón y el cerebro se comunican y cómo la actividad del corazón influye en nuestras percepciones, emociones, intuición y salud.
Al principio de su investigación se plantearon por qué las personas experimentan el sentimiento o la sensación de amor y otras emociones regenerativas, así como el dolor en el área física del corazón. A principios de la década de 1990, fueron pioneros en realizar una investigación que no solo analizó cómo las emociones estresantes afectan la actividad en el sistema nervioso autónomo (SNA) y a los sistemas inmunitarios y hormonales, sino también los efectos de las emociones positivas como la apreciación, la compasión y el cuidado.
¿Cómo se mide la actividad energética, psíquica y emocional del corazón?
A lo largo de los años, han llevado a cabo muchos estudios que han utilizado diferentes medidas fisiológicas como EEG (ondas cerebrales), SCL (conductibilidad de la piel), ECG (corazón), BP (presión arterial), niveles hormonales, etc. Sin embargo, fue la variabilidad de la frecuencia cardíaca o ritmos cardíacos los que arrojaron mediciones más sorprendentes, destacándose este parámetro como el indicador más dinámico de los estados emocionales y con repercusión sobre el nivel de estrés y los procesos cognitivos.
Quedó claro que las emociones estresantes como la frustración, la rabia, el resentimiento, la crítica, etc. conducen a un mayor desorden en los centros cerebrales de nivel superior y el sistema nervioso autónomo y que se reflejan en los ritmos cardíacos y afectan negativamente al funcionamiento de prácticamente todos los sistemas corporales.
Estos datos corroboraban sus teorías y les llevaron a una comprensión mucho más profunda de las vías neuronales y de comunicación entre el corazón y el cerebro. También observaron que el corazón actuaba como si tuviera una mente propia y podría influir significativamente en la forma en que percibimos y respondemos en nuestras interacciones diarias.
En esencia, parecía que el corazón podría afectar a nuestra consciencia, percepciones e inteligencia. Numerosos estudios han demostrado que la coherencia cardíaca es un estado fisiológico óptimo asociado con una mayor función cognitiva, capacidad de autorregulación, estabilidad emocional y resistencia.
Quedó claro que las emociones estresantes como la frustración, la rabia, el resentimiento, la crítica, etc. conducen a un mayor desorden en los centros cerebrales de nivel superior y el sistema nervioso autónomo y que se reflejan en los ritmos cardíacos y afectan negativamente al funcionamiento de prácticamente todos los sistemas corporales.
Estos datos corroboraban sus teorías y les llevaron a una comprensión mucho más profunda de las vías neuronales y de comunicación entre el corazón y el cerebro. También observaron que el corazón actuaba como si tuviera una mente propia y podría influir significativamente en la forma en que percibimos y respondemos en nuestras interacciones diarias.
En esencia, parecía que el corazón podría afectar a nuestra consciencia, percepciones e inteligencia. Numerosos estudios han demostrado que la coherencia cardíaca es un estado fisiológico óptimo asociado con una mayor función cognitiva, capacidad de autorregulación, estabilidad emocional y resistencia.
Comunicación entre el corazón y el cerebro craneal
Gracias a estos estudios tenemos una comprensión científica mucho más profunda de muchas de nuestras preguntas originales que explican cómo y por qué la actividad cardíaca afecta a la claridad mental, a la creatividad, al equilibrio emocional, a la intuición y a la efectividad personal. Las investigaciones del IHM, la Universidad de Stanford, la de Oxford y otras instituciones de prestigio, indican que el corazón es mucho más que una simple bomba. El corazón es, de hecho, un centro de procesamiento de información altamente complejo con su propio cerebro funcional, comúnmente llamado cerebro del corazón.
Este pequeño cerebro del corazón se comunica e influye en el cerebro craneal a través del sistema nervioso, el sistema hormonal y otras vías. Estas influencias afectan a la función cerebral y a la mayoría de los órganos principales del cuerpo y juegan un papel importante en la experiencia mental y emocional y, por lo tanto, en la calidad de nuestras vidas.
En los últimos años, han llevado a cabo una serie de estudios de investigación que han explorado temas como la electrofisiología de la intuición y el grado en que el campo magnético del corazón -que irradia fuera del cuerpo- transporta información que afecta a otras personas e incluso a nuestras mascotas, y conecta y une a las personas de manera sorprendente. También lanzaron a nivel planetario la Iniciativa de coherencia global (GCI), que explora la interconectividad de la humanidad con los campos magnéticos de la Tierra.
Así pues, se puede afirmar que el corazón juega un papel fundamental en nuestra coherencia personal y, además, los cambios positivos que ocurren en la salud, las funciones mentales, la percepción, la felicidad y los niveles de energía a medida que las personas practican las técnicas de HeartMath. Practicar las técnicas aumenta la coherencia del corazón y la capacidad de autorregulación de las emociones desde una referencia interna más intuitiva, inteligente y equilibrada.
Y esa coherencia sigue expandiéndose fuera de la persona a todos los ámbitos en los que participa: familia, amigos, entorno laboral… y por ende se convierte en una herramienta real que propicia el cambio social al afectar a todo cuanto nos rodea… Tal vez solo haga falta que recordemos el concepto de “masa crítica” aplicado a la psicología y la sociología: se trata de alcanzar la cantidad de individuos que vibren en una determinada frecuencia, para que se produzca una reacción social y toda la comunidad logre alcanzar un nuevo nivel de conciencia global.
Este pequeño cerebro del corazón se comunica e influye en el cerebro craneal a través del sistema nervioso, el sistema hormonal y otras vías. Estas influencias afectan a la función cerebral y a la mayoría de los órganos principales del cuerpo y juegan un papel importante en la experiencia mental y emocional y, por lo tanto, en la calidad de nuestras vidas.
En los últimos años, han llevado a cabo una serie de estudios de investigación que han explorado temas como la electrofisiología de la intuición y el grado en que el campo magnético del corazón -que irradia fuera del cuerpo- transporta información que afecta a otras personas e incluso a nuestras mascotas, y conecta y une a las personas de manera sorprendente. También lanzaron a nivel planetario la Iniciativa de coherencia global (GCI), que explora la interconectividad de la humanidad con los campos magnéticos de la Tierra.
Así pues, se puede afirmar que el corazón juega un papel fundamental en nuestra coherencia personal y, además, los cambios positivos que ocurren en la salud, las funciones mentales, la percepción, la felicidad y los niveles de energía a medida que las personas practican las técnicas de HeartMath. Practicar las técnicas aumenta la coherencia del corazón y la capacidad de autorregulación de las emociones desde una referencia interna más intuitiva, inteligente y equilibrada.
Y esa coherencia sigue expandiéndose fuera de la persona a todos los ámbitos en los que participa: familia, amigos, entorno laboral… y por ende se convierte en una herramienta real que propicia el cambio social al afectar a todo cuanto nos rodea… Tal vez solo haga falta que recordemos el concepto de “masa crítica” aplicado a la psicología y la sociología: se trata de alcanzar la cantidad de individuos que vibren en una determinada frecuencia, para que se produzca una reacción social y toda la comunidad logre alcanzar un nuevo nivel de conciencia global.