A lo largo de la historia los diferentes pueblos que atesoran un conocimiento ancestral nos aportan pruebas de que el corazón nos podría ayudar a transitar por los territorios siempre cambiantes e inciertos que experimentamos a diario.
Las investigaciones del Instituto HeartMath nos demuestran que el corazón posee una inteligencia única, diferente de la que nos aporta nuestra mente racional que puede ayudarnos para gestionar mejor los cambios constantes. Al acceder a esa inteligencia la persona adquiere una mayor claridad para tomar decisiones más acordes con su propio bienestar y el del entorno. Además, puede elegir erradicar los pensamientos y sentimientos no deseados, ganar en autoestima y autoafirmación y responder a los retos con una mayor confianza.
No es ninguna casualidad que las culturas antiguas de Grecia a China consideraran al corazón como una fuente primigenia de los sentimientos, inteligencia, virtud y sabiduría. Muchas religiones y tradiciones se refieren al corazón como el lugar donde habita del alma y la vía de acceso al espíritu, o el ser superior.
La cultura occidental se refiere al corazón desde dos vertientes, por un lado, como un órgano físico que bombea nuestra sangre a todo el organismo, pero también como una metáfora que le identifica como la cuna de los sentimientos, la intuición y el centro de la personalidad interna, o ser interno.
Las personas a menudo identifican el lugar donde experimentan emociones tales como la alegría, el amor, el dolor y la tristeza justo en el área del corazón. En muchos idiomas Muchos lenguajes usan expresiones idénticas: “Consulta con tu corazón… habla desde el corazón… pon el corazón en lo que hagas… esta persona se expresa desde el corazón…” Y cuando queremos hacer el mejor elogio de alguien decimos: “Es una persona de buen corazón…”
Las investigaciones del Instituto HeartMath nos demuestran que el corazón posee una inteligencia única, diferente de la que nos aporta nuestra mente racional que puede ayudarnos para gestionar mejor los cambios constantes. Al acceder a esa inteligencia la persona adquiere una mayor claridad para tomar decisiones más acordes con su propio bienestar y el del entorno. Además, puede elegir erradicar los pensamientos y sentimientos no deseados, ganar en autoestima y autoafirmación y responder a los retos con una mayor confianza.
No es ninguna casualidad que las culturas antiguas de Grecia a China consideraran al corazón como una fuente primigenia de los sentimientos, inteligencia, virtud y sabiduría. Muchas religiones y tradiciones se refieren al corazón como el lugar donde habita del alma y la vía de acceso al espíritu, o el ser superior.
La cultura occidental se refiere al corazón desde dos vertientes, por un lado, como un órgano físico que bombea nuestra sangre a todo el organismo, pero también como una metáfora que le identifica como la cuna de los sentimientos, la intuición y el centro de la personalidad interna, o ser interno.
Las personas a menudo identifican el lugar donde experimentan emociones tales como la alegría, el amor, el dolor y la tristeza justo en el área del corazón. En muchos idiomas Muchos lenguajes usan expresiones idénticas: “Consulta con tu corazón… habla desde el corazón… pon el corazón en lo que hagas… esta persona se expresa desde el corazón…” Y cuando queremos hacer el mejor elogio de alguien decimos: “Es una persona de buen corazón…”
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Llevar un diario
Llevar un diario puede ayudarnos a lidiar con un mundo que cambia constantemente. Aquí hay algunas preguntas que podríamos hacernos y que nos permitirían empezar a trabajar para alcanzar una mayor consciencia.
Registrar en el cuaderno, al finalizar el día, los hitos más sobresalientes que nos han sucedido. Después reflejar cómo ese hecho nos ha afectado y por último describir cómo hemos respondido a la situación.
Esta parte nos permitirá darnos cuenta a lo largo del tiempo cómo vamos cambiando nuestra respuesta emocional, ser más conscientes de nuestras reacciones y respuestas automáticas y ser capaces con el paso de los días de tomar mejores decisiones, de relativizar lo que sucede, de simplificar nuestros procesos mentales, etc.
Registrar en el cuaderno, al finalizar el día, los hitos más sobresalientes que nos han sucedido. Después reflejar cómo ese hecho nos ha afectado y por último describir cómo hemos respondido a la situación.
Esta parte nos permitirá darnos cuenta a lo largo del tiempo cómo vamos cambiando nuestra respuesta emocional, ser más conscientes de nuestras reacciones y respuestas automáticas y ser capaces con el paso de los días de tomar mejores decisiones, de relativizar lo que sucede, de simplificar nuestros procesos mentales, etc.
El entorno que te afecta
Otra parte del diario puede estar dedicada a recoger aquellos acontecimientos de nuestro entorno que nos impactan que nos sobrecogen, que nos sorprenden, nos preocupan o nos alarman:
- Haz una lista de los eventos mundiales que han sucedido en los últimos tres meses y que más te han impactado. Aquellos sucesos que te han hecho sentirte inseguro, estresado, dolido, preocupado, impotente, frustrado, desanimado, sobrecargado, ansioso, angustiado, etc.
- Comienza a practicar la técnica de coherencia rápida. Son unos pasos muy sencillos, pero de gran potencia que te ayuda a usar el poder de tu corazón para equilibrar pensamientos y emociones negativos y alcanzar la tranquilidad, el sosiego, la armonía interior que se reflejará en un ritmo cardiaco más equilibrado y facilitará una mejor función cerebral, pero sobre todo acceder a la inteligencia superior.
- Primer paso: Enfocarte en el área del corazón, puedes poner tu mano sobre el centro de tu pecho para ayudar a mantener tu atención en el corazón. Respira lenta y profundamente contando hasta 5 ó 6. Reten el aire tres segundos y exhala contando hasta 5.
- Segundo paso: Imagina que eres capaz de respirar a través de tu corazón, que tu corazón se abre para tomar el oxígeno del aire y se contrae para soltarlo. Busca un ritmo de respiración que te sea cómodo.
- Tercer paso: Genera un sentimiento positivo, evoca un hecho que te hizo sentirte feliz, recuerda a alguien que te inspira sentimientos de amor, ternura, confianza… Llénate de esa sensación e imagina que tu corazón irradia esa energía positiva y te baña por completo, inundándote… Siente como poco a poco vas recuperando tu equilibrio y alcanzas una sensación de tranquilidad y paz interior.
En apenas unos minutos podrás liberar las emociones y sentimientos negativos que experimentabas y alcanzarás una mayor armonía. En apenas 60 segundos se crean cambios positivos en tus ritmos cardiacos enviando señales de gran alcance al cerebro lo que te proporcionará una mayor claridad en la toma de tus decisiones y te embargará una sensación de bienestar profundo, tu corazón genera coherencia que transmite a todo tu cuerpo, a todo tu ser.
Puedes practicar esta técnica a primera hora de la mañana, durante uno o dos minutos, o cuando tengas que tomar decisiones, o en conversaciones difíciles, o cuando sientas que la presión y el estrés empiezan a afectarte. Es una forma para alcanzar una mayor coordinación de todos tus sistemas físicos, psíquicos y emocionales para mejorar tus respuestas y tus reacciones ante lo que estás viviendo.
Reflexión sobre la experiencia vivida
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Tras hacer el ejercicio regresa a tu diario y responde a las siguientes preguntas:
- ¿Tienes una perspectiva nueva o más equilibrada ahora?
- ¿Reconoces que emociones negativas son las que te afectan y te hacen perder tu energía?
- ¿Has comenzado a ver el mundo bajo una nueva luz?
- ¿Eres capaz de interpretar la realidad con un mayor nivel de consciencia?
Si practicas los ejercicios de coherencia rápida diariamente y mantienes el diario durante algunas semanas verás que te proporciona una experiencia gratificante y aprenderás a regular tus emociones para transformar lo negativo en positivo. Aprenderás a mantener esas buenas emociones y sentimientos que generas en tu corazón y esa es la puerta para liberar el poder transformador de la inteligencia del corazón que te ayudará a mejorar tu calidad de vida y una mayor satisfacción en tus relaciones interpersonales.
Fuente: HeartMath Institute
