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Lo que pocos sabían es que también se fue alimentando mi lado negativo, el lado obscuro e ideático negativo, “mi duende verde”, que de igual manera iba creciendo a la par de mi lado positivo, diría el lado perverso, un lado Thanos[[1]]url:#_ftn1 listo para emerger en cualquier momento. Ese lado, que tiene estrategia, objetivos claros, y que no descansa hasta lograr sus objetivos, sean cual fueran estos. Llegue a un punto donde tanto el lado negativo, como el positivo eran tan fuertes que se me dificultada entender la diferencia entre lo correcto e incorrecto, entre lo moral e inmoral, entre lo normal de lo anormal, entre el deber ser, del ser.
Es decir, entré al mundo de la locura. Estando en ese plano, alguien a quien respeto bastante me dijo “eres lo que más alimentes”. Y en teoría es cierto, pero en la práctica me doy cuenta que cada lado se alimenta así mismo, es como los tiburones en altamar, una vez que comen carne y huelen sangre, se activan sus sentidos cada vez que los detectan, y comienzan a estar en un estado furtivo, y de caza.
Reconozco que existen virtuosos que tienen muy claro el lado positivo, y su conducta la llevan en congruencia, al igual que los que se mueven en el lado negativo, su vida la enfocan en base a esas creencias. Pero ¿qué pasa con los que estamos en medio?, es decir, aquellos que no tenemos muy claro los lados de la moneda; aquellos que estamos entre el cielo y el infierno; aquellos que nos gusta estar entre ángeles y también con los demonios, y lo más importante disfrutamos de su compañía, ¿qué somos?, ¿somos incongruentes, indecentes o fenómenos? o ¿o somos sociópatas, psicópatas de closet o bipolares?, o ¿somos los Ronin[[2]]url:#_ftn2 modernos?, es decir los Samuráis sin amo, los parias sociales, los marginados por no responder a un solo lado de la moneda, o ¿somos los John Constantine?,[[3]]url:#_ftn3 los únicos capaces de ver los dos mundos y con la capacidad de poder transitar en ellos y entre ellos, sin perderse así mismo.
La idea puede parecer fantasiosa, pero créame que las fronteras entre los diferentes planos cada vez son más tenues —al menos así las percibo—, por ejemplo, si partimos de que el robo es un delito, que pasa cuando una madre roba un pan para darle de comer a sus hijos, y que está dispuesta a ir a la cárcel con tal de que sus hijos no mueran de hambre, ¿qué pasa ahí? ¿Deberíamos soltar todo el peso de la Ley, por haber robado algo que no le pertenecía, o deberíamos aplaudir su entrega y sacrificio por dar incluso su vida y libertad por sus seres amados?
Es decir, entré al mundo de la locura. Estando en ese plano, alguien a quien respeto bastante me dijo “eres lo que más alimentes”. Y en teoría es cierto, pero en la práctica me doy cuenta que cada lado se alimenta así mismo, es como los tiburones en altamar, una vez que comen carne y huelen sangre, se activan sus sentidos cada vez que los detectan, y comienzan a estar en un estado furtivo, y de caza.
Reconozco que existen virtuosos que tienen muy claro el lado positivo, y su conducta la llevan en congruencia, al igual que los que se mueven en el lado negativo, su vida la enfocan en base a esas creencias. Pero ¿qué pasa con los que estamos en medio?, es decir, aquellos que no tenemos muy claro los lados de la moneda; aquellos que estamos entre el cielo y el infierno; aquellos que nos gusta estar entre ángeles y también con los demonios, y lo más importante disfrutamos de su compañía, ¿qué somos?, ¿somos incongruentes, indecentes o fenómenos? o ¿o somos sociópatas, psicópatas de closet o bipolares?, o ¿somos los Ronin[[2]]url:#_ftn2 modernos?, es decir los Samuráis sin amo, los parias sociales, los marginados por no responder a un solo lado de la moneda, o ¿somos los John Constantine?,[[3]]url:#_ftn3 los únicos capaces de ver los dos mundos y con la capacidad de poder transitar en ellos y entre ellos, sin perderse así mismo.
La idea puede parecer fantasiosa, pero créame que las fronteras entre los diferentes planos cada vez son más tenues —al menos así las percibo—, por ejemplo, si partimos de que el robo es un delito, que pasa cuando una madre roba un pan para darle de comer a sus hijos, y que está dispuesta a ir a la cárcel con tal de que sus hijos no mueran de hambre, ¿qué pasa ahí? ¿Deberíamos soltar todo el peso de la Ley, por haber robado algo que no le pertenecía, o deberíamos aplaudir su entrega y sacrificio por dar incluso su vida y libertad por sus seres amados?
[[1]]url:#_ftnref1 Dios de la destrucción. Personaje del Universo Marvel de Stan Lee
[[2]]url:#_ftnref2 Un rōnin fue un samurái sin un señor o maestro durante el período feudal (1185–1868) de Japón. Un samurái quedó sin maestro tras la muerte de su maestro, o después de la pérdida del favor o privilegio de su maestro.
[[3]]url:#_ftnref3 John Consantine, (nacido, según la ficción, en Liverpool, Inglaterra), es un detective, “hechicero y exorcista , con tendencias amorales y poseedor de valores cuestionables, además de métodos poco ortodoxos. Físicamente reconocible por su gabardina y por estar siempre fumando cigarrillos, Constantine es con la estética del detective clásico.
Interpretando la realidad
O en otro caso, un Soldado que dispara para proteger la libertad de un pueblo, a costa de la muerte de otro pueblo, ¿debemos condecorarlo, o encerrarlo por asesino o genocida? O un Sicario que mata porque es su trabajo, ¿hay que matarlo, y encerrarlo, o mejor contratarlo como un Soldado, para que mate por la libertad de un pueblo, y así lo convirtamos en un patriota?
Me cuesta trabajo entender muchas cosas que pasan en la vida, por ejemplo que tiene que ver que se prohíban popotes, pajitas o agitadores con la cuestión de la protección del medio ambiente; aun cuando cada vez veo más corredores industriales con fábricas que contaminan, y veo acelerados asentamientos urbanos en zonas donde están destruyendo los bosques, o las zonas consideradas pulmones de las ciudades donde construyen fraccionamientos residenciales para unos pocos; que estarían dañando más al planeta, que un popote.
Curiosamente no he visto ninguna campaña contra las inmobiliarias, o contra los empresarios por el daño a la ecología de sus fábricas, pero si veo que ya no puedo usar un popote para tomar mi licuado de fresa en el mercado. Pero lo más sobresaliente es que, la gente se molesta más por no poder usar popotes en sus refrescos, que por las empresas o maquiladoras que están contaminando, o por los fraccionamientos que están construyendo bajo el eslogan del “progreso y desarrollo económico de la ciudad”.
En otros ejemplos, se puede mencionar las empresas refresqueras que están fomentando los buenos hábitos de salud, como hacer deporte, tener una alimentación sana, mientras sus comerciales abonan para que sigas consumiendo más refresco, aumentando con ello, la obesidad y todo un sin número de problemas como la diabetes; o campañas de recaudación navideñas donde se busca obtener más dinero, aun acosta de exhibir como fenómenos de circo a los pobres, discapacitados, los miserables, o todo aquel sujeto que detone una impresión de lastima como el “pobrecito”. Destacando que para que exista un verdadero espíritu de ayuda al prójimo, no necesitas que sea diciembre, o responder a una estimulación Pávloviana donde se te está generando un reflejo condicional, solo basta con que te nazca ayudar y hacerlo, eso es todo.
Me cuesta trabajo entender muchas cosas que pasan en la vida, por ejemplo que tiene que ver que se prohíban popotes, pajitas o agitadores con la cuestión de la protección del medio ambiente; aun cuando cada vez veo más corredores industriales con fábricas que contaminan, y veo acelerados asentamientos urbanos en zonas donde están destruyendo los bosques, o las zonas consideradas pulmones de las ciudades donde construyen fraccionamientos residenciales para unos pocos; que estarían dañando más al planeta, que un popote.
Curiosamente no he visto ninguna campaña contra las inmobiliarias, o contra los empresarios por el daño a la ecología de sus fábricas, pero si veo que ya no puedo usar un popote para tomar mi licuado de fresa en el mercado. Pero lo más sobresaliente es que, la gente se molesta más por no poder usar popotes en sus refrescos, que por las empresas o maquiladoras que están contaminando, o por los fraccionamientos que están construyendo bajo el eslogan del “progreso y desarrollo económico de la ciudad”.
En otros ejemplos, se puede mencionar las empresas refresqueras que están fomentando los buenos hábitos de salud, como hacer deporte, tener una alimentación sana, mientras sus comerciales abonan para que sigas consumiendo más refresco, aumentando con ello, la obesidad y todo un sin número de problemas como la diabetes; o campañas de recaudación navideñas donde se busca obtener más dinero, aun acosta de exhibir como fenómenos de circo a los pobres, discapacitados, los miserables, o todo aquel sujeto que detone una impresión de lastima como el “pobrecito”. Destacando que para que exista un verdadero espíritu de ayuda al prójimo, no necesitas que sea diciembre, o responder a una estimulación Pávloviana donde se te está generando un reflejo condicional, solo basta con que te nazca ayudar y hacerlo, eso es todo.
La lucha entre las dos polaridades
El mundo, lo veo como un gran ring de lucha libre donde existen dos bandos, los rudos y los técnicos, y arriba de ese ring se pegan con todo, con sillas, con mesas, con cualquier objeto que tengan a mano. Se lanzan fuera del ring, hacen llaves y contra-llaves, inclusive exponen toda su integridad por la victoria, hasta el punto de dar su vida para lograrla.
Recuerdo una de las más grandes rivalidades de ese deporte extremo, entre el Psycho Clown[[1]]url:#_ftn1 —técnico— y el Dr. Wagner Jr.[[2]]url:#_ftn2 —rudo—, durante todo un año los contendientes acrecentaron su odio, y sus rivalidades, donde quiera que se encontraban se daban con todo, se lastimaban, involucraban al público para que agarraran partido, hasta el día en que lucharon mascara vs mascara. Tengo presente la contienda, le llamaron la lucha de la década, la cual se celebró el 26 de agosto de 2017 en la Arena Ciudad de México, duro más de una hora, fue sangrienta, extrema, el público estaba eufórico aquí debo confesar mi afición y simpatía por el Dr. Warner Jr. a quien lo admiro desde siempre, para mí “él es mejor, me considero su fan dese siempre”. Al final, pierde la máscara mi ídolo, mi todo, mi gran héroe, yo estaba desecho, tan enojado que deje de ver lucha libre por un mes, estaba deprimido.
Para mí era el fin de la lucha libre, pero cuál fue mi sorpresa una vez que paso mí duelo, ver al Dr. Warner Jr. y al Psycho Clown juntos, como una pareja, como equipo, aliados enfrentando a todos los luchadores, habidos y por haber, durante el año siguiente representó la pareja con mayores triunfos, los más taquilleros, los más explosivos, y más carismáticos, mi corazón se llenó de júbilo al ver la evolución de ambos luchadores.
Me doy cuenta, que a veces mi actitud ante la vida es fungir como referí de las contiendas de los dos bandos, en otras ocasiones soy espectador, y en otras tomo partido, pero al final del día reconozco los razonamientos de ambos bandos, y entiendo que llegará el día que se alíen para un bien mayor que los supere, y evolucionarán a un nivel mágico, que permita salvarlo todo. Estaré pendiente cuando eso pase y lo celebrare sumándome a ese grandioso equipo.
Recuerdo una de las más grandes rivalidades de ese deporte extremo, entre el Psycho Clown[[1]]url:#_ftn1 —técnico— y el Dr. Wagner Jr.[[2]]url:#_ftn2 —rudo—, durante todo un año los contendientes acrecentaron su odio, y sus rivalidades, donde quiera que se encontraban se daban con todo, se lastimaban, involucraban al público para que agarraran partido, hasta el día en que lucharon mascara vs mascara. Tengo presente la contienda, le llamaron la lucha de la década, la cual se celebró el 26 de agosto de 2017 en la Arena Ciudad de México, duro más de una hora, fue sangrienta, extrema, el público estaba eufórico aquí debo confesar mi afición y simpatía por el Dr. Warner Jr. a quien lo admiro desde siempre, para mí “él es mejor, me considero su fan dese siempre”. Al final, pierde la máscara mi ídolo, mi todo, mi gran héroe, yo estaba desecho, tan enojado que deje de ver lucha libre por un mes, estaba deprimido.
Para mí era el fin de la lucha libre, pero cuál fue mi sorpresa una vez que paso mí duelo, ver al Dr. Warner Jr. y al Psycho Clown juntos, como una pareja, como equipo, aliados enfrentando a todos los luchadores, habidos y por haber, durante el año siguiente representó la pareja con mayores triunfos, los más taquilleros, los más explosivos, y más carismáticos, mi corazón se llenó de júbilo al ver la evolución de ambos luchadores.
Me doy cuenta, que a veces mi actitud ante la vida es fungir como referí de las contiendas de los dos bandos, en otras ocasiones soy espectador, y en otras tomo partido, pero al final del día reconozco los razonamientos de ambos bandos, y entiendo que llegará el día que se alíen para un bien mayor que los supere, y evolucionarán a un nivel mágico, que permita salvarlo todo. Estaré pendiente cuando eso pase y lo celebrare sumándome a ese grandioso equipo.
[[1]]url:#_ftnref1 Psycho Clown (1985) es el nombre de un mexicano Luchador enmascarado. El personaje de Psycho Clown es el de un payaso de pesadilla y es parte de Los PsychoCircus junto con Monster Clown y Murder Clown. El nombre real de Psycho Clown no es un asunto público, como suele ser el caso de los luchadores enmascarados en México donde sus vidas privadas se mantienen en secreto de los fanáticos de la lucha libre. Es hijo de José Alvarado Nieves. Quien luchaba bajo el nombre de "Brazo de Plata" y anteriormente trabajó como Brazo de Plata Jr. Sus hermanos, Máximo, Goya Kong, Andros de Plata y Muñeca de Plata también son luchadores profesionales. Clown ha encabezado numerosos eventos de pago por visión de AAA, incluidos los tres últimos Triple manías ( XXIV , XXV y XXVI ) durante sus peleas de titular o Apuestas
[[2]]url:#_ftnref2 Juan Manuel González Barrón (1965) es un luchador mexicano que se conoce mejor con el nombre de ring Dr. Wagner Jr., habiendo usado ese nombre desde 1987. Es el hijo de Manuel. González Rivera, más conocido como el Dr. Wagner y el hermano de César Cuauhtémoc González Barrón, quien trabaja principalmente bajo el nombre de Rey de Plata. Su hijo hizo su lucha libre debut en 2009 bajo el nombre de El Hijo de Dr. Wagner Jr. González estuvo casado con la luchadora profesional María Moreno León, más conocida como Rossy Moreno
¿Cómo veo el mundo?
La manera en la que veo el mundo, me lleva a reconocer que: puedo ser de las personas que cuando el Chapo Guzmán[[1]]url:#_ftn1 se escapó por segunda vez de la cárcel dijo “ese es un chingón”, y que se indignó por su extradición; soy de los que se alegró por que perdiera la Selección de futbol mexicana en el último mundial diciéndoles “qué bueno, por pendejos”; soy de los que se enojan cuando el lobo feroz no puede comerse a los tres cochinitos en el cuento infantil, “me encantaría que algún día los hiciera carnitas”.
Soy de los que se visten de indigente, con ropa de diseñador y se autodenomina intelectual, o Hípster;[[2]]url:#_ftn2 soy de los que se indigna por lo que pasa en los pueblos hermanos en Venezuela, Guatemala, Colombia, Irán e Irak entre otros, y cuando veo un migrante en un crucero sube el vidrio para no darle ni siquiera una moneda.
Soy de los que odian al Capitán América del mundo Marvel y lo considera el más “pendejo” de todos por su sentido patriótico, y que me cae a todo dar, Tony Stark con toda su actitud narcisista, de niño rico, y de empresario global. Además, considero que el mejor superhéroe de todos es Thanos, el destructor, porque el sí sabe y hace lo que se necesita para que la humanidad y todos los universos sigan existiendo; soy de los que se alegró cuando murió la mama de Bambi, y entendió que debía morir para alimentar a otros.
Soy de los que les gusta ir a la Iglesia todos los domingos y escuchar el mensaje bíblico, mientras en casa soy fan del trabajo de Nietzsche,[[3]]url:#_ftn3 Foucault[[4]]url:#_ftn4 y la filosofía alemana (Marx,[[5]]url:#_ftn5 Engels[[6]]url:#_ftn6 y Heidegger[[7]]url:#_ftn7 ) con toda su crítica sobre las instituciones religiosas, considerándolas el “opio de la sociedad”; soy de los que se indignan y molestan cuando escucho en las noticias sobre los embates del narcotráfico, las muertes, los secuestros de los migrantes, pero también soy de los que en una fiesta cuando escucho Los Corridos Alterados del Komander,[[8]]url:#_ftn8 Gerardo Ortiz[[9]]url:#_ftn9 o Beto Quintanilla,[[10]]url:#_ftn10 destapa una cerveza y dice al aire ¡salud!
Soy de los que escuchan trova, música de protesta que detone una reflexión existencial y política a favor de los derechos de las mujeres, pero también soy de los que les gusta ver como bailan el reguetón, y hasta me gusta ver como “perrean”; soy de los que están de acuerdo con prohibir que se consuma comida animal (vaca, cerdo o cualquier ser vivo), y eso lo pienso mientras prendo el carbón en mi asador, para comerme un buen corte de T-bone, RibEye, Arrachera, o un New York; soy de los que piensan que ¡las cosas son como son, y así nada más!
Recuerdo mucho la película El Infierno[[11]]url:#_ftn11 del director Luis Estrada, estrenada en él 2010, había un personaje llamando el Cochiloco interpretado por el actor Joaquín Cosío Osuna, quien expresa la siguiente frase “una cosa es una cosa, y otra cosa es otra cosa”, refiriéndose que su trabajo era de ser Sicario, pero él tenía una vida en familia, donde era fiel creyente de la iglesia y un devoto de los valores familiares.
Me parece que la posición del Cochiloco desde un mundo racional es muy contradictoria, pero desde un mundo irracional se puede reflexionar. Al igual que el de la mujer que roba por alimentar a sus hijos, o la actividad del soldado, el sicario, la prohibición de los popotes, la creación de más fraccionamientos, el fomento de la vida saludable, el consumo de más refrescos, la lucha libre y sus similitudes con la “vida real”; o toda mi contradictoria manera de ver el mundo.
Al final del día ¡las cosas son como son, y así nada más! o como el Chochiloco diría “una cosa es una cosa, y otra cosa es otra cosa” o también lo podríamos esbozar como el hecho de que estamos viviendo escenarios complejos, y realidades fragmentadas, las cuales cada vez más responden a sociedades dinamizadas por sus sujetos y por sus objetos sociales, o comúnmente llamados problemas, o necesidades (Acevedo, 2017). Tal condición nos lleva a buscar planteamientos distintos, reflexiones diversas, el escuchar nuestras propias voces internas, las cuales nos acerquen más hacia el entendimiento de la humanidad. Empezando por un principio básico, el reconocer nuestra propia humanidad, en la cual, cohabitan esos dos lados de la moneda, nuestra propia “maldad” y “bondad”, y en esa medida, en la cual reconozcamos nuestros propios matices, lograr mayor unidad, mayor equilibrio y paz, que nos armonice con el todo, y, por ende, con los demás. Considerado que ese puede ser un principio —entre muchos otros— para sanarnos, y así sanar a nuestra sociedad, o, dicho de otra manera, el generar mecanismos para la reconstrucción del tejido social a partir de reflexiones más profundas sobre nuestro propio sentir, pensar y proceder (González, 2018).
Soy de los que se visten de indigente, con ropa de diseñador y se autodenomina intelectual, o Hípster;[[2]]url:#_ftn2 soy de los que se indigna por lo que pasa en los pueblos hermanos en Venezuela, Guatemala, Colombia, Irán e Irak entre otros, y cuando veo un migrante en un crucero sube el vidrio para no darle ni siquiera una moneda.
Soy de los que odian al Capitán América del mundo Marvel y lo considera el más “pendejo” de todos por su sentido patriótico, y que me cae a todo dar, Tony Stark con toda su actitud narcisista, de niño rico, y de empresario global. Además, considero que el mejor superhéroe de todos es Thanos, el destructor, porque el sí sabe y hace lo que se necesita para que la humanidad y todos los universos sigan existiendo; soy de los que se alegró cuando murió la mama de Bambi, y entendió que debía morir para alimentar a otros.
Soy de los que les gusta ir a la Iglesia todos los domingos y escuchar el mensaje bíblico, mientras en casa soy fan del trabajo de Nietzsche,[[3]]url:#_ftn3 Foucault[[4]]url:#_ftn4 y la filosofía alemana (Marx,[[5]]url:#_ftn5 Engels[[6]]url:#_ftn6 y Heidegger[[7]]url:#_ftn7 ) con toda su crítica sobre las instituciones religiosas, considerándolas el “opio de la sociedad”; soy de los que se indignan y molestan cuando escucho en las noticias sobre los embates del narcotráfico, las muertes, los secuestros de los migrantes, pero también soy de los que en una fiesta cuando escucho Los Corridos Alterados del Komander,[[8]]url:#_ftn8 Gerardo Ortiz[[9]]url:#_ftn9 o Beto Quintanilla,[[10]]url:#_ftn10 destapa una cerveza y dice al aire ¡salud!
Soy de los que escuchan trova, música de protesta que detone una reflexión existencial y política a favor de los derechos de las mujeres, pero también soy de los que les gusta ver como bailan el reguetón, y hasta me gusta ver como “perrean”; soy de los que están de acuerdo con prohibir que se consuma comida animal (vaca, cerdo o cualquier ser vivo), y eso lo pienso mientras prendo el carbón en mi asador, para comerme un buen corte de T-bone, RibEye, Arrachera, o un New York; soy de los que piensan que ¡las cosas son como son, y así nada más!
Recuerdo mucho la película El Infierno[[11]]url:#_ftn11 del director Luis Estrada, estrenada en él 2010, había un personaje llamando el Cochiloco interpretado por el actor Joaquín Cosío Osuna, quien expresa la siguiente frase “una cosa es una cosa, y otra cosa es otra cosa”, refiriéndose que su trabajo era de ser Sicario, pero él tenía una vida en familia, donde era fiel creyente de la iglesia y un devoto de los valores familiares.
Me parece que la posición del Cochiloco desde un mundo racional es muy contradictoria, pero desde un mundo irracional se puede reflexionar. Al igual que el de la mujer que roba por alimentar a sus hijos, o la actividad del soldado, el sicario, la prohibición de los popotes, la creación de más fraccionamientos, el fomento de la vida saludable, el consumo de más refrescos, la lucha libre y sus similitudes con la “vida real”; o toda mi contradictoria manera de ver el mundo.
Al final del día ¡las cosas son como son, y así nada más! o como el Chochiloco diría “una cosa es una cosa, y otra cosa es otra cosa” o también lo podríamos esbozar como el hecho de que estamos viviendo escenarios complejos, y realidades fragmentadas, las cuales cada vez más responden a sociedades dinamizadas por sus sujetos y por sus objetos sociales, o comúnmente llamados problemas, o necesidades (Acevedo, 2017). Tal condición nos lleva a buscar planteamientos distintos, reflexiones diversas, el escuchar nuestras propias voces internas, las cuales nos acerquen más hacia el entendimiento de la humanidad. Empezando por un principio básico, el reconocer nuestra propia humanidad, en la cual, cohabitan esos dos lados de la moneda, nuestra propia “maldad” y “bondad”, y en esa medida, en la cual reconozcamos nuestros propios matices, lograr mayor unidad, mayor equilibrio y paz, que nos armonice con el todo, y, por ende, con los demás. Considerado que ese puede ser un principio —entre muchos otros— para sanarnos, y así sanar a nuestra sociedad, o, dicho de otra manera, el generar mecanismos para la reconstrucción del tejido social a partir de reflexiones más profundas sobre nuestro propio sentir, pensar y proceder (González, 2018).
[[1]]url:#_ftnref1 Joaquín Archivaldo Guzmán Loera (1957) es un capo de la droga mexicano y ex líder del cartel de Sinaloa, una criminal Organización que lleva el nombre del estado mexicano de la costa del Pacífico de Sinaloa, donde se formó. Se le conoce como "El Chapo", y se convirtió en el principal capo de la droga de México en 2003 después de la detención de su rival Osiel Cárdenas Guillén del cartel del golfo. Fue considerado el "narcotraficante más poderoso del mundo" por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
[[2]]url:#_ftnref2 La subcultura inconformista está compuesta estereotípicamente de adultos jóvenes que residen principalmente en vecindarios gentrificados. Está ampliamente asociado con la música indie y alternativa y géneros como el chill-out, el folk, el rock moderno, el pop rock y el post-Britpop. Con frecuencia, los hípsters hacen alarde de una variada sensibilidad de moda no convencional, tiendas vintage y de segunda mano: ropa comprada, vistas pacifistas y verdes, generalmente veganas., alimentos orgánicos y artesanales, bebidas alcohólicas artesanales y estilos de vida alternativos. La subcultura típicamente consiste en adultos jóvenes, en su mayoría blancos, que viven en áreas urbanas. Se ha descrito como un "crisol de estilos, gustos y comportamientos mutantes y transatlánticos"
[[3]]url:#_ftnref3 Filósofo alemán, crítico cultural, compositor, poeta, filólogo y erudito cuya obra ha ejercido una profunda influencia en la filosofía occidental y la historia intelectual moderna
[[4]]url:#_ftnref4 Filósofo francés, historiador de las ideas, teórico social y crítico literario
[[5]]url:#_ftnref5 Filósofo, economista, historiador, sociólogo, teólogo político, periodista y revolucionario socialista alemán
[[6]]url:#_ftnref6 Filósofo, comunista, científico social, periodista y empresario alemán
[[7]]url:#_ftnref7 Filósofo alemán y un pensador en la tradición continental y la hermenéutica filosófica, y "es ampliamente reconocido como uno de los filósofos más originales e importantes del siglo XX"
[[8]]url:#_ftnref8 José Alfredo Ríos Meza (Culiacán, Sinaloa, 29 de abril de 1983) más conocido por su nombre artístico, El Komander, es un cantante y compositor de música banda y corridos
[[9]]url:#_ftnref9 Gerardo Ortiz Medina (Pasadena, Estados Unidos, 5 de octubre de 1989), conocido simplemente como Gerardo Ortiz, es un cantante y compositor mexicano del género banda, especialmente en los subgéneros de Norteño-Banda, Corridos y los conocidos como Narco-corridos
[[10]]url:#_ftnref10 cantante, compositor y músico mexicano. Beto era conocido como "El Mero León Del Corrido " “El jefe del león del corrido"
[[11]]url:#_ftnref11 Película mexicana escrita y dirigida por Luis Estrada y protagonizada por Damián Alcázar en el 2010, película que relata la problemática del narcotráfico y el crimen organizado en México y a la vez una crítica al sexenio del expresidente Felipe Calderón Hinojosa.
