La salud, base fundamental para la felicidad: Capítulo 4



Rafael Ruiz Centeno

11/07/2019

“La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Esa es la definición de Salud que nos ofrece la Organización Mundial de la Salud y parece bastante completa.
Normalmente consideramos que estamos enfermos cuando empiezan a aparecer los primeros síntomas. Sin embargo, el proceso de disfunción comienza bastante antes y tiene diferentes frentes abiertos a los que debemos prestar atención: físico, energético, mental/emocional y espiritual.



Ayudas inestimables para nuestra salud

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Sí, porque inestimable podemos considerar la ayuda de conocer lo que pueden aportarnos la alimentación, la suplementación y las plantas para nuestra nutrición y para corregir déficits o procesos no equilibrados en la misma. Con ese objetivo vamos a detallar, en cada área, una recomendación en forma de decálogo sobre productos/elementos naturales que tendrán esa incidencia positiva sobre nuestra salud. Seguramente se podrían hacer muchos otros distintos, o ampliar estos mismos, pero son una buena base para todos aquellos que estén interesados en cuidarse partiendo de unos cuantos conceptos claros.

Ah, y tenga en cuenta las alergias e intolerancias que últimamente parecen afectar mucho a sectores amplios de la población. Ser prudentes es siempre uno de los mejores consejos que se pueden dar. Al igual que consultar con su médico si ya está siendo tratado por el mismo/a para alguna dolencia en particular por las posibles interacciones con esos tratamientos.

DIEZ ALIMENTOS NATURALES MUY RECOMENDABLES

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1.- Manzana: Sin duda la reina de las frutas. "Una manzana al día te mantiene alejada/o de las medicinas". La puede tomar cualquier persona y en cualquier edad y condición. Tiene vitamina C, fibra (soluble e insoluble), flavonoides, la cáscara contiene pectina... Con una mínima ayuda resuelve diarreas, estreñimiento, protege la mucosa intestinal, reduce azúcar y grasas en sangre, es antioxidante...
2.-Brócoli: Es la hortaliza estrella de la alimentación. Es depurativo (elimina toxinas), antioxidante, fortalece las defensas, ayuda en la prevención del cáncer. Apoya el funcionamiento cerebral y el crecimiento muscular. Contiene vitaminas A, C y E, potasio, zinc, calcio, magnesio fibra y aminoácidos.
3.-Agua pura (desmineralizada): No podríamos vivir sin ella. Lo más libre de minerales posible, pues esos minerales inorgánicos no los podemos asimilar en nuestro organismo y en cambio podrían formar cálculos en algunos órganos o conductos internos perjudicándolos.
4.-Huevos: Son ricos en proteínas, vitaminas, minerales y grasas, se digieren con facilidad y presentan un bajo aporte calórico. También aportan factores de transferencia (educación para nuestro sistema inmunitario). Hay una controversia reciente sobre si el colesterol que contienen puede resultar perjudicial para personas con un índice alto y hay que tener cuidado en su manipulación para evitar la salmonelosis (intoxicación alimentaria producida por la bacteria salmonella).
5.- Ajo: Contiene minerales (potasio, calcio, manganeso, fósforo...), vitaminas C y B (6), flavonoides, aceites esenciales derivados del azufre...  Entre los principales beneficios están que es una ayuda importante para cualquier afección del sistema cardiovascular (corazón y circulación) ya que es hipotensor, reduce el colesterol, arteriosclerosis, infartos y anginas de pecho, es un potente antibacteriano, antifúngico, depurativo...
6.- Frutos secos (especialmente nueces): Favorecen un buen funcionamiento del sistema cardiovascular, la microcirculación cerebral, el buen funcionamiento del sistema nervioso, ayuda a combatir la inflamación, tienen efecto saciante y aumenta los niveles de serotonina (hormona del "bienestar" o del "buen humor"). Tienen un gran aporte calórico, aunque hay ya numerosos estudios que comprueban que no inciden de una manera directa en la tendencia al aumento de peso o la obesidad.
7.- Semillas: Hay una buena variedad de ellas (lino, girasol, chía, calabaza, etc) y aunque varían sus nutrientes en función de la variedad de que se trate, podemos establecer que en general contienen fibra (buena salud intestinal y previene de enfermedades crónicas), minerales y grasas saludables. Y además hay algunas que se "especializan" para prevención y ayuda en procesos desequilibrados (amapola para el sistema nervioso, pomelo como bactericida, etc.)
8.- Cúrcuma y otras especias: A pesar de la creencia popular, no excitan las mucosas gástricas, sino que las protegen y contribuyen a un buen funcionamiento de los procesos digestivos y también (en el caso de la cúrcuma concretamente) es uno de los mejores y más potentes antiinflamatorios de uso interno que se conocen.
9.- Jengibre: Por la calidad y cantidad de sus nutrientes (aminoácidos, vitaminas, minerales, flavonoides, aceites esenciales...) es muy beneficioso para una gran variedad de procesos (es antiviral, estimula la circulación sanguínea, es útil en afecciones respiratorias, mejora los procesos digestivos y es también un buen antiinflamatorio y analgésico natural). 
10.- Guanábana: Es una fruta tropical (en algunos países se la conoce con el nombre de graviola) que ha demostrado ser muy útil para reducir los síntomas difíciles de personas sometidas a terapias que debilitan sobremanera el sistema inmunológico (radioterapia y quimioterapia). Y también contribuye a la eliminación de células tumorales en procesos cancerígenos sin parecer afectar a las células sanas.

DIEZ SUPLEMENTOS IMPRESCINDIBLES

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1.- Magnesio: Es difícil establecer una clasificación "por importancia" de minerales, pero si ello fuera posible el magnesio figuraría sin duda en los primeros lugares. Y es que este mineral participa en alrededor de 300 procesos químico-biológicos de nuestro organismo. A nivel global podemos decir que tiene mucho que ver con los sistemas muscular y articular. También es fundamental para la fijación de otros minerales en nuestro organismo (calcio, fósforo, etc.), así como de una multitud de nutrientes que se ven muy favorecidos en cuanto a su biodisponibilidad (asimilación) por la presencia de este elemento. Es bueno para cualquier edad y condición, y en cuanto a su cantidad, cuanto más mejor. En general cualquier mineral resulta más beneficioso y asimilable en su forma orgánica (obtenido a partir de plantas, vegetales o animales) que en la forma inorgánica. Sólo nos falta recordar que en algunas de las formas de presentación que lo podemos encontrar (actualmente hay 11 formas distintas en el mercado) pueden tener un efecto laxante, mientras otras no producen ese efecto.
2.- Vitamina C: Al igual que sucede con el magnesio, la vitamina C resulta imprescindible para una multitud de procesos de nuestro organismo, aunque si hubiera que resaltar alguno diríamos que tiene mucho que ver con nuestro sistema inmune (fomación y aumento de nuestras defensas) así como para los procesos antioxidantes (antienvejecimiento). Mejor en forma de ascorbato de calcio que en la forma de ácido ascórbico. La ingesta diaria recomendada es de entre 80 y 90 mg, aunque hay ya algunos expertos que están revisando al alza este consumo.
3.- Calcio: Es el mineral más abundante en nuestro organismo (aproximadamente el 2% del total del peso de nuestro cuerpo) siendo vital para el mantenimiento de huesos, dientes y estructura esquelética, así como para la contracción muscular, la coagulación sanguínea, el funcionamiento del sistema nervioso y bastantes funciones celulares. Para una buena absorción del calcio por nuestro organismo es conveniente tomarlo junto con la vitamina D y el magnesio, así como hacer ejercicio de una forma moderada. Es preferible la ingesta de calcio de origen vegetal (sésamo, almendras, nueces, lino, chía, cereales integrales, garbanzos...) que el de origen animal (leche y derivados lácteos)
4.- Potasio: También este mineral interviene en multitud de procesos orgánicos (es el 3º más abundante en nuestro organismo), entre los que cabe destacar que es necesario para el equilibrio normal del agua en nuestro interior, para que las células conserven su equilibrio osmótico (que no haya ganancia ni perdida de agua), y es básico para un buen funcionamiento muscular. También regula la cantidad de sodio ya que un exceso de este último elemento conllevaría probablemente a una hipertensión u otros problemas de tipo cardiovascular. Aunque su necesidad habrá que establecerla en función de la ingesta de sodio, se ha establecido que necesitamos entre 3000 y 4000 mg (entre 3 y 4 gramos) de potasio al día.
5.- Triptófano: Es un aminoácido (sustancias necesarias en todos los procesos metabólicos de nuestro organismo) esencial (no lo fabrica nuestro organismo partiendo de otros, sino que debe ser adquirido a través de la alimentación) que se necesita para la elaboración directa de la serotonina e indirecta de la melatonina (hormonas que intervienen para regular funciones tan importantes como el sueño, el apetito y el estado de ánimo). Concretamente a la serotonina se le llama la hormona del bienestar o la hormona de la felicidad. Su correcto funcionamiento se ve favorecido por la presencia de magnesio y de una de las vitaminas del grupo B (B6).
6.- Omega 3: Son grasas (las formas más concentradas de energía, nuestros depósitos energéticos) esenciales (no las fabrica nuestro organismo) imprescindibles para un buen funcionamiento del sistema cardiovascular y que también son muy importantes para nuestras funciones cerebrales. Deben estar en una correcta proporción con otras grasas (los omega 6) para cumplir bien su función, y como la alimentación actual presenta mucha más cantidad de omega 6 es necesaria la suplementación deficitaria de omega 3.
7.- Probióticos: Son microorganismos vivos que residen en lo que se ha dado en llamar la flora intestinal. Ahí en realidad hay millones y millones de microorganismos de infinidad de formas y clases, y a una parte de ellos (formada principalmente por algunas familias de bacterias y levaduras) se les llama probióticos porque son básicamente beneficiosos para nuestra salud (vida). Intervienen en la correcta asimilación de nutrientes en nuestro intestino, así como en la formación de un sistema inmunológico equilibrado. Las dos cepas (familias) que parecen ser más potentes para ese bienestar intestinal son las de los lactobacillus acidophilus y las bifidubacterium bífidus.
8.- Melatonina: Es una hormona que se secreta (produce) en nuestra glándula pineal y que tiene una incidencia directa en regular los ciclos de vigilia-sueño en nuestro organismo (de los que dependen a su vez otros importantes), en aliviar síntomas depresivos y en todas aquellas afecciones que cursan o se producen por una deficiencia de vitamina D en nuestro organismo. También contribuye al buen funcionamiento de nuestro sistema inmunológico.
9.- Astaxantina: Es un carotenoide (por simplificar, sustancias que son las responsables de los pigmentos naturales en animales y plantas) que ha demostrado ser el antioxidante (antienvejecimiento) natural más potente que existe. Si bien envejecer es un proceso orgánico que hay que aceptar con naturalidad, el hacerlo de una forma apresurada o repentina sí nos debería hacer prestar especial atención a por qué se está acelerando ese proceso. Su suplementación es muy ventajosa para la piel, la vista y la salud celular en general. Interviene (aparte de en la captación de radicales libres) en el incremento de la función inmunológica, la salud cardiovascular y mejora la resistencia en la actividad física. La podemos encontrar en alimentos de color rojo de origen vegetal (frutas y bayas, normalmente) y de origen animal (salmón, krill, camarones...).
10.- Vitamina D3+Vitamina K2: Para algunos expertos este es el tándem suplementario fundamental, situándolo al mismo nivel que el magnesio o la vitamina C. Se potencian los efectos de ambas vitaminas cuando se consumen conjuntamente (la vitamina D en general reduce la mortalidad en personas de cualquier grupo y la K2 se encarga de que el calcio se fije en los huesos y no se concentre en las arterias, evitando así fracturas y enfermedades cardiovasculares). En personas con problemas de coagulación sanguínea conviene

DIEZ PLANTAS FANTÁSTICAS

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1.- Té Verde: Es rico en antioxidantes, favorece el buen funcionamiento del hígado, ayuda a bajar de peso, es cardioprotector, favorece nuestro sistema digestivo, es un analgésico y antiinflamatorio natural moderado, fortalece el sistema inmunitario... Un regalo de la naturaleza para nuestra salud.
2.- Cola de caballo: Es la mejor planta diurética conocida (beneficia contra la retención de líquidos, gota, edemas, cálculos renales, infecciones urinarias), es adelgazante y depurativa, reminelarizante (aunque pueda parecer lo contrario por sus efectos diuréticos), regenerante y cicatrizante, beneficiosa para la piel, pelo y uñas…
3.- Equinácea: Es la planta más recomendable cuando se trate de potenciar nuestro sistema inmune y por tanto nos ayuda a evitar resfriados, como preventivo o tratamiento para la gripe, disminuye la mucosidad, la fiebre y la tos... Podíamos catalogarla como un antibiótico y antiinflamatorio natural muy eficaz.
4.- Harpagofito: Debido a su acción antiinflamatoria es también un fenomenal analgésico y antirreumático natural. Mejora nuestro sistema digestivo (aumenta la producción de bilis), calma espasmos intestinales, es depurativo y disminuye el colesterol, estimula el apetito por sus compuestos amargos...
5.- Aloe Vera: Es la planta más recomendable para cualquier afección de la piel, sea cual sea su origen. Y a ello se añade últimamente los beneficios de tomarla a nivel interno en forma de zumos o jugos, ya que es depurativa, tiene efectos antivirales, favorece la regulación de la glucosa en sangre, es desintoxicante, contribuye a un buen funcionamiento y salud intestinal...
6.- Hinojo: Es el mejor aliado cuando se trate de favorecer cualquier proceso digestivo que nos afecte. Ayuda a reducir los gases, es expectorante, reduce los espasmos en los órganos digestivos, es un buen regulador tanto en diarreas como en casos de estreñimiento, antiséptico, favorece el apetito, disminuye el dolor de estómago y los cólicos abdominales...
7.- Estevia: Es una planta que se utiliza como sustitutivo del azúcar. En cuanto a su sabor es más potente que el azúcar, pero con la ventaja que tiene cero calorías. Y hay algunos expertos que van más allá señalando que cuando se consume sin transformar (en infusiones) es beneficiosa para tratar diabetes moderadas (tipo 2) así como afecciones del sistema cardiovascular (colesterol, triglicéridos...).
8.- Hipérico: Es una planta muy recomendable para tratar afecciones de tipo nervioso y de desequilibro emocional. Tanto en casos de ansiedad, nerviosismo, insomnio, irritabilidad, como en procesos de signo "contrario" como depresiones moderadas o leves. Reduce los dolores de cabeza y aplicada en uso externo colabora en la curación de heridas y reactiva la circulación en casos de varices.
9.-Espirulina-Clorella: Las incluimos en este capítulo porque son plantas de agua (microalgas realmente). La ingesta conjunta de ambas favorece los procesos de detoxificación (limpieza de toxinas a nivel interno), son una excelente fuente de proteína vegetal, aportan minerales y aminoácidos en una muy apreciada proporción y también vitaminas del grupo B incluyendo la B12 que es difícil de obtener de origen vegetal. Un excelente aporte nutricional.
10.- Desmodio: Disponer de una planta que favorezca enormemente el funcionamiento del hígado y la vesícula (de los que se ha estudiado que intervienen en unos 500 procesos distintos en nuestro organismo) es disponer de una ayuda inestimable para nosotros. Y eso es lo que hace esta planta. Ya sabemos que es el único de nuestros órganos que es "regenerable" y el desmodio contribuye no solo a la normalización de esas funciones del hígado, sino que puede ser el aliado perfecto para revertir los procesos degradantes del mismo que le afecten. 






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