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La risa es una medicina gratuita y natural a la que todos podemos tener acceso, el universo es más milagroso de lo que suponemos. El humor, la risa y la sonrisa tienen innumerables beneficios psicológicos, nos ayudan a superar los problemas que se nos presentan de la mejor manera ya que el mecanismo de la risa está relacionado con el hemisferio derecho del cerebro que tiene un tipo de soluciones distinto a las que presenta el hemisferio izquierdo.
Por otra parte, los últimos estudios que se han realizado para comprobar los beneficios terapéuticos de la risa confirman que previene muchos tipos de enfermedades. Reírse nos hace sentir vivos y reduce el nivel de estrés, además el humor es el camino más directo para conectarse con uno mismo y mejorar la relación con los demás.
La realidad es que, en la medida que uno va cambiando su visión de la vida, la vida cambia, eso es algo que viene determinado por la física cuántica y no se refiere sólo a las partículas que observamos en un microscopio sino a todo en general, tal como define muy acertadamente el Kybalión: “Como es arriba así es abajo”. Por tanto, podemos decir que si dejamos que el humor esté presente en nuestra vida tendremos una visión amable de la misma y todo se acondicionará a esa forma de percibirla. Así:
El humor, la risa y la sonrisa tienen innumerables beneficios psicológicos, nos ayudan a superar los problemas que se nos presentan de la mejor manera. La risa previene enfermedades del corazón, ya que una de las principales causas de ataques al corazón son el miedo y la ira. En el trabajo, la gente puede aprender a usar la risa para incrementar tanto la satisfacción personal como la productividad. Ante una situación que provoca emociones negativas, lo mejor es apelar al humor como herramienta para solucionar y superar el problema. Por otra parte, los últimos estudios que se han realizado para comprobar los beneficios terapéuticos de la risa confirman que previene muchos tipos de enfermedades. Reírse nos hace sentir vivos y reduce el nivel de estrés, además el humor es el camino más directo para conectarse con uno mismo y mejorar la relación con los demás.
La realidad es que, en la medida que uno va cambiando su visión de la vida, la vida cambia, eso es algo que viene determinado por la física cuántica y no se refiere sólo a las partículas que observamos en un microscopio sino a todo en general, tal como define muy acertadamente el Kybalión: “Como es arriba así es abajo”. Por tanto, podemos decir que si dejamos que el humor esté presente en nuestra vida tendremos una visión amable de la misma y todo se acondicionará a esa forma de percibirla. Así:
La verdad es que siempre me he considerado una persona con sentido del humor, me gusta contar chistes y reírme de mí mismo cuando me sucede algo gracioso aunque mi imagen salga mal parada, pero es que me he dado cuenta de que, gracias a ello, las cosas desagradables de la vida las supero mejor y no me afectan tanto en el plano físico. Quiero decir con eso que es muy importante la forma en que uno se toma las cosas que le pasan, porque dependiendo de cómo se enfrenten así será su influencia en nuestro cuerpo y en nuestra salud.
Por lo general, cuando estamos dentro de algún problema que nos aqueja tendemos a preocuparnos, a deprimirnos, etc. y esto en lugar de ayudar empeora la situación. Si en lugar de elegir el sufrimiento elegimos la risa y aprendemos a encontrar el humor aún en los momentos difíciles, dejaremos a un lado la actitud compasiva hacia nosotros mismos, dejaremos de sentir lástima por nosotros mismos y en lugar de la compasión pondremos en marcha mecanismos cerebrales que nos ayudarán a encontrar la mejor solución a nuestros problemas.
Sufrir ante los problemas representa una actitud negativa ante la vida, mientras que reír cuando se manifiesta un problema representa una actitud positiva; la diferencia es considerable teniendo en cuenta que la risa provoca respuestas fisiológicas beneficiosas en nuestro cuerpo, como la liberación de endorfinas (analgésico natural de nuestro organismo) y la reducción del cortisol, que deprime nuestro sistema inmunológico y que se libera, sobre todo, como resultado del estrés al que estamos sometidos.
Pero, ¿cómo reír ante los problemas? Roger Von Oech, un especialista pionero en el estudio de la creatividad, ha escrito varias obras acerca de la importancia de sintonizar nuestro canal mental, es decir, orientar nuestra atención hacia aquello que nos brinda optimismo, nos hace reír y nos alegra el espíritu.
El ejercicio que propone Von Oech es el siguiente: echa un vistazo a tu alrededor y busca cinco cosas que tengan el color azul. Con esa predisposición mental "azul" verás que todo lo azul viene hacia ti: un libro azul sobre la mesa, un almohadón azul, una cuadro de ese color, etc. Del mismo modo, cada vez que uno aprende una palabra nueva crees escucharla a cada paso, o cuando compras un coche nuevo comienzas a ver ese modelo por todos lados. Esto sucede porque la gente encuentra lo que está buscando. Si tú buscas pesimismo y desaliento, los encontrarás. Si, en cambio, buscas buenas vibraciones y pensamientos agradables, verás como se multiplican a tu alrededor. Todo es cuestión del canal mental que hayas seleccionado: tú decides.
Nuestro canal mental, nuestra predisposición, nos llevan en la dirección hacia lo que queremos dirigirnos. En este caso, aprender a reír cuando tenemos ganas de llorar. Entonces el primer gran paso para tomarse la vida con humor es sintonizar en positivo y procurar encontrar risas a cada paso.
Beneficios físicos de la risa
Hasta ahora se sabía que la risa mejoraba el estado de salud. Ahora un nuevo estudio ha descubierto que además cambia la química de la sangre, protege al organismo contra la enfermedad y la depresión, así como que detiene las enfermedades cardiacas. El nuevo estudio, realizado por una universidad de California, ha demostrado que los cambios producidos por la sonrisa tienen lugar en el nivel químico del cuerpo y que provoca que el individuo sienta cierto bienestar físico durante 24 horas. El efecto en la sangre es perceptible desde que se conoce que el sujeto va a vivir una experiencia agradable, según esta investigación, realizada con 16 hombres sanos que no habían hecho ejercicio físico ni recibido medicación alguna.
Según esta investigación, la sangre de los individuos a los que se les han realizado las pruebas aumentaba en un 27% su cantidad de beta-endorfinas y en un 87% otros tipos de hormonas relacionadas con el crecimiento, sólo con el anuncio de que verían un vídeo de humor, en comparación con la sangre de otros individuos del grupo de prueba a los que no se les decía nada.
Por lo tanto, las beta-endorfinas aumentaban en relación tanto con la anticipación como con la experiencia de una sonrisa alegre. Asimismo, esta cantidad se mantenía durante el tiempo en que veían el vídeo y después de terminar de verlo, lo que significa que, sin lugar a dudas, sonreír conlleva importantes implicaciones tanto para el bienestar, como para la prevención de enfermedades y para la reducción del estrés.
El sistema inmunológico también mejora con las sonrisas debido a que, cuando una persona sonríe se suceden una serie de cambios en su psicología, que permanecen durante un largo periodo de tiempo.
Anteriores estudios habían demostrado que el hecho de ver un vídeo divertido podía reducir los síntomas de estrés crónico, responsables de la reducción de las respuestas inmunitarias, en especial las relacionadas con las defensas anti-virus y anti-tumorales.
Asimismo, el año pasado un grupo de cardiólogos del Centro Médico de la universidad de Maryland descubrieron que un sentido del humor activo podía prevenir enfermedades cardiacas debido a que la sonrisa impacta directamente en la funcionalidad de los vasos sanguíneos, facilitando el fluido de la sangre, tal como informó oportunamente un comunicado de la mencionada universidad.
Se suele decir que la risa es el aerobics del alma debido a que, cuando nos reímos de verdad y a carcajadas, ejercitamos todos los sistemas de nuestro cuerpo.
Piensa en la última vez que te reíste de verdad y recuerda cómo te dolía todo el cuerpo al dejar de reír, eso era porque habías hecho ejercicio. Nuestro sistema cardiovascular, por ejemplo, se ejercita cada vez que el ritmo cardíaco y la presión sanguínea aumentan para luego descender nuevamente. Nuestra agitada respiración crea un vigoroso intercambio de aire en los pulmones y constituye un saludable ejercicio para el sistema respiratorio. Además nuestros músculos liberan tensiones caca vez que se contraen y se relajan. Por último, por ejemplo, hay que tener en cuenta que 20 segundos de carcajadas supone el mismo ejercicio para el corazón que 3 minutos de remo.
En los últimos años se han realizado numerosos estudios para determinar la influencia de la risa en nuestro cerebro y, por consiguiente, en nuestras reacciones y en el funcionamiento orgánico, especialmente desde que se comprobó en experimentos realizados en hospitales que la risa ayuda a recuperar antes la salud de los enfermos. Tan sólo basta recordar las experiencias llevadas a cabo por el Doctor Patch Adams que fueron llevadas a la pantalla con notable éxito y donde se podía constatar que cuando a los enfermos se les eliminaba la angustia y el miedo a base de proporcionarles momentos de humor, la respuesta no se hacía esperar en forma de aumento del número de altas hospitalarias.
Tal como explica al respecto la Universidad de Indiana, la risa relaja los músculos tensos, reduce la producción de hormonas que causan el estrés, rebaja la presión de la sangre, y ayuda a incrementar la absorción de oxígeno en la sangre. También ayuda a quemar calorías puesto que movilizamos unos 400 músculos del cuerpo.
La primera persona en sugerir que el humor y la risa podían beneficiar a la salud humana fue Norman Cousins , un profesor de medicina de la Medical Humanities for the School of Medicine de la Universidad de California en Los Ángeles, que se dedicó a investigar la bioquímica de las emociones humanas, y que desarrolló un programa de recuperación que incluía la risa y que experimentó consigo mismo, puesto que Cousins sufría una enfermedad autoinmune.
En la actualidad, existe ya todo un método de curación basado en la risa, la Risoterapia, que se está utilizando como fuente de relajación y de rejuvenecimiento, así como de tratamiento del estrés y de las depresiones; como método de adelgazamiento y de curación del insomnio o de problemas cardiovasculares y respiratorios, entre otros fines.
Como hemos podido apreciar, la risa, el humor, el tomarse las cosas de una manera menos dramática de lo que solemos tomárnoslas, redunda en beneficios de todo tipo para nuestra salud y, por consiguiente, una actitud negativa, pesimista y victimista -a la que quienes ven la vida a través de gafas muy negras suelen llamar “realista”- nos aportará justo todo lo contrario, es decir, desajustes energéticos, físicos y mentales que terminarán provocándonos enfermedades. Lo he dicho muchas veces y no me cansaré de repetirlo: no hemos nacido en un valle de lágrimas sino para ser felices, así que tratemos de serlo y viviremos una vida saludable.
Según esta investigación, la sangre de los individuos a los que se les han realizado las pruebas aumentaba en un 27% su cantidad de beta-endorfinas y en un 87% otros tipos de hormonas relacionadas con el crecimiento, sólo con el anuncio de que verían un vídeo de humor, en comparación con la sangre de otros individuos del grupo de prueba a los que no se les decía nada.
Por lo tanto, las beta-endorfinas aumentaban en relación tanto con la anticipación como con la experiencia de una sonrisa alegre. Asimismo, esta cantidad se mantenía durante el tiempo en que veían el vídeo y después de terminar de verlo, lo que significa que, sin lugar a dudas, sonreír conlleva importantes implicaciones tanto para el bienestar, como para la prevención de enfermedades y para la reducción del estrés.
El sistema inmunológico también mejora con las sonrisas debido a que, cuando una persona sonríe se suceden una serie de cambios en su psicología, que permanecen durante un largo periodo de tiempo.
Anteriores estudios habían demostrado que el hecho de ver un vídeo divertido podía reducir los síntomas de estrés crónico, responsables de la reducción de las respuestas inmunitarias, en especial las relacionadas con las defensas anti-virus y anti-tumorales.
Asimismo, el año pasado un grupo de cardiólogos del Centro Médico de la universidad de Maryland descubrieron que un sentido del humor activo podía prevenir enfermedades cardiacas debido a que la sonrisa impacta directamente en la funcionalidad de los vasos sanguíneos, facilitando el fluido de la sangre, tal como informó oportunamente un comunicado de la mencionada universidad.
Se suele decir que la risa es el aerobics del alma debido a que, cuando nos reímos de verdad y a carcajadas, ejercitamos todos los sistemas de nuestro cuerpo.
Piensa en la última vez que te reíste de verdad y recuerda cómo te dolía todo el cuerpo al dejar de reír, eso era porque habías hecho ejercicio. Nuestro sistema cardiovascular, por ejemplo, se ejercita cada vez que el ritmo cardíaco y la presión sanguínea aumentan para luego descender nuevamente. Nuestra agitada respiración crea un vigoroso intercambio de aire en los pulmones y constituye un saludable ejercicio para el sistema respiratorio. Además nuestros músculos liberan tensiones caca vez que se contraen y se relajan. Por último, por ejemplo, hay que tener en cuenta que 20 segundos de carcajadas supone el mismo ejercicio para el corazón que 3 minutos de remo.
En los últimos años se han realizado numerosos estudios para determinar la influencia de la risa en nuestro cerebro y, por consiguiente, en nuestras reacciones y en el funcionamiento orgánico, especialmente desde que se comprobó en experimentos realizados en hospitales que la risa ayuda a recuperar antes la salud de los enfermos. Tan sólo basta recordar las experiencias llevadas a cabo por el Doctor Patch Adams que fueron llevadas a la pantalla con notable éxito y donde se podía constatar que cuando a los enfermos se les eliminaba la angustia y el miedo a base de proporcionarles momentos de humor, la respuesta no se hacía esperar en forma de aumento del número de altas hospitalarias.
Tal como explica al respecto la Universidad de Indiana, la risa relaja los músculos tensos, reduce la producción de hormonas que causan el estrés, rebaja la presión de la sangre, y ayuda a incrementar la absorción de oxígeno en la sangre. También ayuda a quemar calorías puesto que movilizamos unos 400 músculos del cuerpo.
La primera persona en sugerir que el humor y la risa podían beneficiar a la salud humana fue Norman Cousins , un profesor de medicina de la Medical Humanities for the School of Medicine de la Universidad de California en Los Ángeles, que se dedicó a investigar la bioquímica de las emociones humanas, y que desarrolló un programa de recuperación que incluía la risa y que experimentó consigo mismo, puesto que Cousins sufría una enfermedad autoinmune.
En la actualidad, existe ya todo un método de curación basado en la risa, la Risoterapia, que se está utilizando como fuente de relajación y de rejuvenecimiento, así como de tratamiento del estrés y de las depresiones; como método de adelgazamiento y de curación del insomnio o de problemas cardiovasculares y respiratorios, entre otros fines.
Como hemos podido apreciar, la risa, el humor, el tomarse las cosas de una manera menos dramática de lo que solemos tomárnoslas, redunda en beneficios de todo tipo para nuestra salud y, por consiguiente, una actitud negativa, pesimista y victimista -a la que quienes ven la vida a través de gafas muy negras suelen llamar “realista”- nos aportará justo todo lo contrario, es decir, desajustes energéticos, físicos y mentales que terminarán provocándonos enfermedades. Lo he dicho muchas veces y no me cansaré de repetirlo: no hemos nacido en un valle de lágrimas sino para ser felices, así que tratemos de serlo y viviremos una vida saludable.