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Hay mil maneras de arrodillarse y besar la tierra.
Un mismo acto o gesto puede ser representado de muchas formas y también tener muchos significados diferentes.
Dios te pasa de un sentimiento a otro y te enseña por medio de los opuestos, para que tengas dos alas para volar, no una. Los aspectos positivos y negativos de la vida, nos enseñan la diferencia entre los unos y los otros para que podamos saber apreciarlos.
Cuando haces cosas desde tu alma, sientes un río moviéndose dentro de ti, una alegría. Cuando la acción viene de otra sección, el sentimiento desaparece. Aquellas acciones que realizamos desde nuestra convicción más absoluta, son las que más crecimiento interior y placer personal nos aportarán.
Algunas cosas abren nuestras alas, algunas cosas hacen que el aburrimiento y dolor desaparezcan. Las experiencias positivas que vivimos hacen que la vida valga la pena vivirla, nos reconfortan y motivan.
Así es como moriré en el amor que tengo por ti: como piezas de nube disueltas en la luz solar. El amor puede ser una fuerza muy poderosa y vivir dentro de nosotros durante toda nuestra existencia.
No me arrepiento de lo mucho que amo, y evito aquellos que se arrepienten de su pasión. No debemos arrepentirnos de aquello que alguna vez hicimos para nuestra satisfacción personal, pues en la vida es lo que nos llevaremos.
El silencio es el lenguaje de Dios, todo lo demás es pobre traducción. En el silencio, todas las personas somos iguales, los idiomas separan a los pueblos y generan diferencias entre las personas.
La brisa de la madrugada tiene secretos que contarte. No te vayas a dormir. Durante la noche podemos dedicarnos a reflexionar y dar rienda suelta a nuestros pensamientos. Enfocando nuestra atención.
Donde hay ruina, hay esperanza para un tesoro. Para poder mejorar en un aspecto éste siempre tiene que ser mejorable, de las situaciones más desastrosas o de los errores cometidos es de donde pueden surgir los mayores imperios o los mayores aciertos.
No pienses que el jardín pierde su éxtasis en invierno. Es silencioso, pero sus raíces están ahí debajo. Incluso cuando todo parece perdido, siempre existe la oportunidad de volver a comenzar y reconstruir todo aquello que una vez tuvimos.
Eleva tus palabras, no la voz. Es la lluvia lo que hace crecer las flores, no los truenos. En la vida, para poder prosperar necesitamos nuestras ideas para poder alcanzar la gloria.
El amor viene con un cuchillo, no con alguna pregunta tímida, y no con miedos por su reputación. El amor puede ser algo muy doloroso y cuando nos ha hecho daño cuesta mucho volver a confiar en él.
Este amor es la rosa que florece para siempre. El amor puede ser algo imperecedero y vivir para siempre dentro de nuestro ser.
Solo desde el corazón puedes tocar el cielo. Sin amor ni pasión nunca alcanzaremos aquello que más deseamos en la vida, la felicidad.
No te des la vuelta. Mantén tu mirada en el lugar vendado. Ahí es donde entra la luz. Nuestras heridas nos permiten aprender del error y mejorar como individuos para que no vuelva a sucedernos.
Riega los árboles frutales y no las espinas. Debemos valorar aquello que más nos aporte en la vida y cuidarlo como se merece.
Cómo puedo saber algo sobre el pasado o futuro cuando la luz del amado brilla solo ahora. Lo único de que disponemos realmente en la vida es el ahora, el momento presente, el pasado no se puede cambiar y el futuro aún no ha sucedido.
El dolor que abrazamos se convierte en alegría. Llévalo a tus brazos donde puede cambiar. Saber entender por qué algo nos hizo daño nos permitirá entender dónde fallamos y cómo podemos corregirlo para evitar que vuelva a repetirse.
Permítete a ti mismo ser silenciado por el tirón más grande de lo que verdaderamente amas. Luchar por hacer realidad nuestros sueños es algo que debe ser nuestra principal prioridad.