Foto de Alexander Kagan en Unsplash
Estar atentos a lo que nos sucede, tanto por dentro como por fuera, es una tarea complicada. La Naturaleza nos ha provisto de 100 millones de neuronas para informarnos de lo que sucede más allá de nuestra piel, y en eso nos basamos a la hora de tomar decisiones; sin embargo, también nos ha provisto de 100 mil millones de neuronas (mil veces más) que nos informan de lo que nos pasa por dentro, aunque a esas no les solemos hacer mucho caso, porque las informaciones las percibimos como intuiciones, corazonadas, «pálpitos»... y, por tanto, no nos dan ninguna seguridad.
¡Qué equivocados estamos! Al cabo del día tomamos decisiones basadas en cosas tan engañosas como las que nos transmiten los cinco sentidos, incluido el de la vista, y no hacemos caso a lo que nos dice el corazón que tiene muchos más parámetros. Mejor nos iría si nos guiáramos por lo que nos dicta él, seguro que acertábamos en nuestras decisiones con mayor probabilidad que si solo utilizamos la mente racional, que como todo el mundo sabe suele ser la menos objetiva.
Bien, así pues, cuando empiece el año 2023 será una oportunidad inestimable para hacer planes, pero que sean razonablemente realizables, para que no tengamos escapatoria con la excusa de que eran muy difíciles de cumplir. Tú mejor que nadie sabes lo que puedes conseguir y lo que no, así que no seas tonto/a y no dejes pasar la oportunidad de mejorar tu vida, sobre todo en el ámbito de la salud, tanto física como emocional. A lo mejor decides dejar de fumar y lo consigues, esa sería la mejor decisión que podrías tomar en tu vida.
Ponte objetivos cercanos en el tiempo para que puedas ir recogiendo los resultados y te animen a seguir adelante. Si puedes, ponte de acuerdo con otro/a para que no te sientas solo/a y os animéis mutuamente y proponte también un plan de ayuda altruista para devolver al Universo algo de lo que ha traído en el año que acaba, porque seguro que también habrás recibido cosas buenas, no solo materiales.
Os deseo a todos, amigos y amigas, el mejor año cada año que comience de ahora en adelante, que estén llenos de sorpresas y suerte inesperada.
¡Qué equivocados estamos! Al cabo del día tomamos decisiones basadas en cosas tan engañosas como las que nos transmiten los cinco sentidos, incluido el de la vista, y no hacemos caso a lo que nos dice el corazón que tiene muchos más parámetros. Mejor nos iría si nos guiáramos por lo que nos dicta él, seguro que acertábamos en nuestras decisiones con mayor probabilidad que si solo utilizamos la mente racional, que como todo el mundo sabe suele ser la menos objetiva.
Bien, así pues, cuando empiece el año 2023 será una oportunidad inestimable para hacer planes, pero que sean razonablemente realizables, para que no tengamos escapatoria con la excusa de que eran muy difíciles de cumplir. Tú mejor que nadie sabes lo que puedes conseguir y lo que no, así que no seas tonto/a y no dejes pasar la oportunidad de mejorar tu vida, sobre todo en el ámbito de la salud, tanto física como emocional. A lo mejor decides dejar de fumar y lo consigues, esa sería la mejor decisión que podrías tomar en tu vida.
Ponte objetivos cercanos en el tiempo para que puedas ir recogiendo los resultados y te animen a seguir adelante. Si puedes, ponte de acuerdo con otro/a para que no te sientas solo/a y os animéis mutuamente y proponte también un plan de ayuda altruista para devolver al Universo algo de lo que ha traído en el año que acaba, porque seguro que también habrás recibido cosas buenas, no solo materiales.
Os deseo a todos, amigos y amigas, el mejor año cada año que comience de ahora en adelante, que estén llenos de sorpresas y suerte inesperada.